En México, la región sur tiene los mayores niveles de pobreza e inseguridad alimentaria. La falta de preparación en gran parte de sus trabajadores ha provocado que los ingresos sean menores a otras regiones, ya que el 40.8% de su población económicamente activa no cuenta con secundaria. A su vez, la recaudación local es baja, lo que provoca una mayor dependencia de las aportaciones (transferencias federales que buscan disminuir el rezago social). La región norte tiene los menores niveles de pobreza. Sin embargo, presentan niveles de endeudamiento mayores que dejan menos recursos para programas sociales. La región centro presenta niveles altos de pobreza, pero obtiene la mayor parte del gasto público en entidades federativas.
1 Introducción
En México existen varios programas sociales destinados a combatir los niveles de pobreza extrema. Sin embargo, de acuerdo con datos de CONEVAL (2017), los recursos de estos programas no han sido distribuidos de manera eficiente ni equitativa. Existen dos fondos creados principalmente para combatir o erradicar estos niveles de pobreza: el Fondo de compensación y el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS).
El Fondo de compensación distribuye recursos a las 10 entidades federativas con menores niveles de Producto Interno Bruto (PIB) per cápita no minero y no petrolero. Dichos recursos provienen de los 2/11 de la recaudación derivada de las cuotas aplicadas a la venta final de gasolina y diésel, de acuerdo con lo establecido en el artículo 2°-A, fracción II, de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)1 (Cámara de Diputados 2018a).
El FAIS tiene como principal objetivo el financiamiento de obras, acciones sociales básicas e inversiones que beneficien directamente a la población en pobreza extrema (Cámara de Diputados 2018a). Además, se aplica en localidades con alto o muy alto nivel de rezago social, y en las zonas de atención prioritaria (Cámara de Diputados 2018b).
En este boletín, se presenta los niveles de pobreza que hay en las entidades federativas por región1. Así como su relación respecto al Fondo de compensación, al FAIS, a los ingresos estatales, al nivel de endeudamiento y al gasto público federal en las entidades federativas.
Los niveles de pobreza en la región norte de 2010 al 2016 disminuyeron de 35% a 27.6%. En cambio, en las regiones centro y sur las variaciones han sido mínimas, ya que en el centro sólo se logró disminuir de 42.0% en 2010 a 41.0% en 2016. Por otro lado, lo que respecta a la zona sur los niveles de pobreza pasaron de 60.9% en 2010 a 60.2% en 2016. La región centro mantuvo niveles de pobreza superiores al 41%, mientras que la región sur tuvo un nivel máximo de 60.9% durante esos seis años (ver Cuadro 1 y Mapa 1).
Las reducciones más importantes en todas las regiones han sido en los niveles de pobreza extrema, ya que la región norte pasó de 5.2% en 2010 a 2.4% en 2016. En el mismo periodo, la región centro pasó de 7.8% a 4.8%. La región sur de 21.4% a 16% (ver Cuadro 1).
En la región norte, Zacatecas fue el único estado que obtuvo apoyo del Fondo de compensación y la mayor cantidad en el FAIS per cápita en 2018. De 2010 a 2016, los niveles de pobreza extrema de esta entidad federativa disminuyeron de 10.8% en 2010 a 3.5% en 2016 (ver Cuadros 1 y 2). En esta misma región, Zacatecas, Durango y Nayarit tuvieron los mayores apoyos por FAIS (614, 563 y 576 pesos per cápita, respectivamente) y fueron de los estados con mayor porcentaje de inseguridad alimentaria respecto a su población, pues Zacatecas tenía 36%, Durango 39.8% y Nayarit 44% en 2016 (ver Cuadro 2 y Mapa 2).
En la región centro, San Luis Potosí, Michoacán e Hidalgo tienen el FAIS per cápita más alto en 2018 (al menos 639 pesos) y su porcentaje de inseguridad alimentaria también fue de los más altas en 2016, ya que San Luis Potosí cuenta con el 42.5%, Michoacán con el 51.5% y finalmente Hidalgo, con el porcentaje más elevado de inseguridad en esta región, con el 53.3% respecto a su población (ver Cuadro 2).
En la región sur, los estados con mayor FAIS per cápita en 2018 son Chiapas (2,249 pesos), Guerrero (1,705 pesos) y Oaxaca (1,798 pesos), pero también fueron de los estados con mayor inseguridad alimentaria en 2016 con un 52.2%, 57.1% y 62.4% respecto a su población, respectivamente. Tabasco, que pertenece a esta región, fue el estado con mayor inseguridad alimentaria del país con un 69.4% de su población en estas condiciones (ver cuadro 2).
Morelos, de la región sur, que incrementó sus niveles de pobreza de 43.2% en 2010 a 49.5% en 2016, no contará con apoyo del Fondo de Compensación en 2018 y tendrá el FAIS per cápita menor de la región en este año (389 pesos) (ver Cuadros 1 y 2).
En la región sur, Chiapas fue el estado con el mayor número de personas económicamente activas (PEA) sin secundaria terminada en 2016 con 51.5%, además de tener el ingreso promedio más bajo en el mismo año (1,942 pesos per cápita). En cambio, en la región norte se observó un caso distinto, pues Nuevo León fue uno de los estados con menores cifras de personas económicamente activas (PEA) sin secundaria terminada con un 19.1% , seguido de la Ciudad de México, región centro, que tiene un porcentaje de 15.1%. De acuerdo con lo anterior, los dos estados cuentan con los ingresos promedio más altos del país con 8,918 y 6,585 pesos per cápita, respectivamente (ver Cuadro 2 y Mapa 3).
2 Ingresos estatales
En la región norte, Nuevo León, Baja California y Baja California Sur tuvieron una mayor recaudación de agua y predial en 2016 (1,599, 1,719 y 1,688 pesos per cápita correspondientemente). En estos estados, la población en pobreza extrema disminuyó más de la mitad de 2010 a 2016 (ver Cuadros 1 y 3).
En la zona centro, Ciudad de México tuvo una recaudación per cápita de 2,666 pesos en 2016 y tenía el nivel de pobreza extrema más bajo de la región en 2016 (1.8%) (ver cuadros 1 y 3).
En la región sur, Quintana Roo fue la entidad federativa con la mayor recaudación de agua y predial per cápita (2,312 pesos) y tenía los niveles de pobreza extrema más bajos de la región en 2016 (4.2%). Oaxaca con la menor recaudación de agua y predial en la zona (148 pesos en 2016), tenía altos niveles de pobreza extrema (26.9%). En cambio, Tlaxcala con una recaudación de agua y predial de sólo 194 pesos, tenía también menores niveles de pobreza extrema comparado con la mayoría de los estados de su región en 2016 (5.7%) (ver cuadros 1 y 3).
La región sur recibe la mayor cantidad de aportaciones per cápita en 2018, que son recursos destinados a disminuir el rezago social (6,836 pesos). La región centro, es la que recibe los mayores recursos per cápita por participaciones en este año (6,868 pesos). La región norte fue la que mayor PIB (202,547 pesos) y recaudación de impuestos locales (2,703 pesos) per cápita tuvo en 2016 (ver Cuadro 3).
Algunos estados han tenido una relación positiva respecto a la recaudación de agua y predial y la disminución de los niveles de pobreza, de acuerdo con datos de INEGI (2017) y SHCP (2017); por ejemplo, estados como Baja California y Baja California Sur, zona norte, tuvieron recaudaciones per cápita de 1719 y 1688 pesos per cápita, asimismo disminuyeron sus niveles de pobreza extrema; por parte de Baja California de 3.4% en 2010 a 1.1% en 2016 y de Baja California Sur de 4.6% en 2010 a 1.6% en 2016, como ya se mencionó. Un punto importante que se puede rescatar de estos datos es que una mayor recaudación podría ser un factor que contribuya a disminuir los niveles de rezago social en las entidades federativas.
3 Endeudamiento en los estados
La región norte tenía el monto de deuda más alto del país en junio de 2018 (7,456 pesos per cápita), aunque también los niveles más bajos de pobreza en 2016 (27.6%). En la región centro, Ciudad de México, Colima y Michoacán (mayor a 3,152 pesos per cápita) y en la región sur, Quintana Roo, Veracruz y Chiapas (mayor a 3,157 pesos per cápita) fueron las entidades federativas con un endeudamiento superior al promedio de la región que fue de 3,157 pesos per cápita (ver Cuadros 1 y 4).
El perfil de la deuda de la región norte está en peores condiciones comparada con la región centro y sur, ya que presenta un endeudamiento de 112.3% respecto a las participaciones (o 3.7% respecto al PIB de la región). A su vez, la tasa de interés es mayor (9.2%) y que se aplica a la mayor deuda per cápita promedio (7,456 pesos) (ver Cuadro 4). Esto genera que el servicio de la deuda deje menores recursos para programas sociales que puedan disminuir los niveles de pobreza.
El endeudamiento de las entidades federativas en las tres regiones del país tuvo una relación positiva con respecto a la disminución en los niveles de pobreza, pues de acuerdo con un análisis realizado con datos de CONEVAL (2017) las entidades que tenían un mayor nivel de endeudamiento también tenían un menor nivel de rezago social. Tal es el caso de Nuevo León que tiene el nivel más bajo de pobreza extrema en 2016 (0.6%) y la deuda per cápita más alta de todo el país con 12,886 pesos per cápita.
4 Gasto público federal en los estados
Baja California y Baja California Sur tienen una inversión pública per cápita de 2,555 y 2,115 pesos respectivamente en 2018 que coincide con uno de los niveles más bajos de pobreza en la región norte en 2016 (22%). Nuevo León con los niveles más bajos de pobreza en el país en 2016 (14.2%) tiene una inversión pública de sólo 571 pesos per cápita en 2018 (por debajo del promedio regional de 954 pesos per cápita) (ver Cuadros 1 y 5).
En la región centro, Ciudad de México, Hidalgo y México son los tres estados que cuentan con mayor inversión pública en 2018 (3,670, 2,035 y 1,543 pesos per cápita respectivamente) y no necesariamente tienen los menores niveles de pobreza. México e Hidalgo con niveles de inseguridad alimentaria mayores al 44% (ver Cuadros 2 y 5).
En la región sur, Tabasco (23,035 pesos) y Campeche (98,001 pesos) son los estados que mayor inversión pública per cápita tienen en 2018, pero sus niveles de pobreza eran superiores al 43% en 2016 (ver Cuadros 1 y 5).
La región centro concentra el mayor gasto público en los estados para transferencias (26,106 pesos per cápita), servicios personales (11,209 pesos per cápita) y servicios generales (3,147 pesos per cápita). Esto es ocasionado principalmente porque Ciudad de México recibe la inmensa mayoría de los recursos por estos conceptos en 2018 (ver cuadro 5).
5 Conclusiones
Los mayores apoyos del FAIS per cápita han sido proporcionados a las entidades con menores niveles de pobreza e inseguridad alimentaria, la cual representa falta de acceso a la alimentación, ya que la infraestructura social o la falta de esta no ha mostrado una disminución en los niveles de inseguridad alimentaria. El FAIS y la inseguridad alimentaría mostraron una relación inversa de acuerdo con los datos que se obtuvieron de CONEVAL (2017), pues estados como Zacatecas (región norte); Hidalgo (zona centro) y Chiapas (zona sur) que cuentan con niveles de FAIS altos (613.6, 738.9 y 2249.4 pesos per cápita) también muestran algunos de los niveles más altos en inseguridad alimentaria (36%, 53.2% y 52.2%, respecto a su población). Para una mayor eficacia en la distribución de estos recursos podría ser mejor una mayor planeación y reglas que beneficien de mejor manera a la población en situación de pobreza.
La recaudación de agua y predial, recursos muy importantes de los municipios porque representan una parte de los ingresos propios que no dependen del gobierno federal sino de la recaudación que logre cada gobierno local, no ha sido utilizada de manera eficiente ya que no se ve mejora, en algunos estados, en los niveles de pobreza extrema, pues un análisis realizado con datos de CONEVAL (2017) mostró una relación inversa entre ambas.
Una inversión pública per cápita alta no necesariamente implica que las entidades federativas disminuyan sus niveles de pobreza, ya que algunos estados como Nuevo León (zona norte) y Tlaxcala (zona sur) tuvieron inversiones per cápita bajas (571 y 240 pesos, respectivamente) comparadas con el promedio regional, 954 (zona norte) y 4811 (zona sur) pesos per cápita, y contribuyeron a una disminución significativa de pobreza extrema, ya que en 2016 fueron los dos estados con el porcentaje más bajo de su región; Nuevo León con 0.6% y Tlaxcala con 5.7%. Así como deudas per cápita altas pueden reflejar incrementos en los niveles de pobreza al tener un mayor recurso que podría ser destinado a programas que ayuden a disminuir el rezago social.
La región norte concentra menores niveles de pobreza y mayores niveles de deuda. La región sur, mayores niveles de pobreza y de trabajadores sin secundaria terminada. La falta de preparación puede hacer complicado que se alcancen salarios mejor remunerados. La zona centro concentra mayor gasto público en las entidades federativas y menores niveles de deuda.
Ciudad de México recibe la mayor parte del gasto público en las entidades federativas, razón por la cual una descentralización de secretarías y dependencias gubernamentales permitiría que haya una distribución de recursos entre los estados más equitativa y pueda ayudar a disminuir los niveles de pobreza regionales, ya que según una publicación realizada por Héctor Molina (2018) esto ayudaría a incrementar el nivel de empleo y competencia local.
1 Se redistribuyen 2/11 de estos recursos petroleros a los 10 estados más pobres.
2 La región norte esta conformada por Nuevo León, Sonora, Sinaloa, Coahuila, Zacatecas, Durango, Tamaulipas, Nayarit, Baja California, Baja California Sur y Chihuahua. Por otro lado, la región centro se conforma por Aguascalientes, Ciudad de México, Colima, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Querétaro y San Luis Potosí; y finalmente, la zona sur formada por Campeche, Chiapas, Guerrero, Morelos, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz y Yucatán.