El programa Jóvenes Construyendo el Futuro (JCF) requeriría de 99 mil 360 millones de pesos (mdp) para cumplir el objetivo de capacitar a 2.3 millones de jóvenes que no estudian y no trabajan, otorgándoles una beca de 3 mil 600 pesos mensuales hasta por un año. Sin embargo, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) cuenta con un presupuesto de 40 mil mdp en el PEF 2019 para este propósito
1 Introducción
Por medio de una transferencia económica, el programa JCF busca incidir en la población de 18 a 29 años. Por una parte, pretende incentivar el ingreso y permanencia de 300 mil jóvenes en educación superior, y por otra promover la inserción de jóvenes que no estudian y no trabajan al mercado laboral.
Tan solo en capacitación, JCF tiene una población objetivo de 2.3 millones de jóvenes. No obstante, la ENIGH 2016 cuantificó una población potencial de jóvenes que no estudian y no trabajan, con edades de 18 a 29 años, de 5.2 millones de personas. De esta forma, el número de jóvenes que cumplen con el perfil para solicitar esta beca podría ser mayor que lo previsto.
Entre los lineamientos del programa no se encuentran mecanismos explícitos para acotar el número de beneficiarios a 2.3 millones de jóvenes, sin estas normas el número de jóvenes inscritos podría superar las estimaciones de población objetivo del programa.
2 Jóvenes Construyendo el Futuro
El programa JCF tiene dos vertientes. La primera, a cargo de la SEP, busca beneficiar a 300 mil estudiantes de educación superior con una beca mensual de 2 mil 400 pesos mientras duren sus estudios.
La segunda, operada por la STPS, tiene el propósito de promover el fortalecimiento y adquisición de habilidades técnicas y socioemocionales1 en 2.3 millones de jóvenes que no estudian y no trabajan, becándolos con 3 mil 600 pesos mensuales hasta por un año (Secretaría del Trabajo y Previsión Social 2019).
En conjunto, JCF tiene un presupuesto para 2019 de 44 mil 320 mdp: 40 mil mdp para la STPS y 4 mil 320 mdp asignados a la SEP (Secretaría de Hacienda y Crédito Público 2019). Dichos montos representan 92.4% del presupuesto total de la STPS y 0.6% del presupuesto educativo para este año2.
A pesar de que los once programas presupuestarios que opera la STPS tuvieron recortes en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, con el programa JCF su presupuesto total registró un incremento en términos reales de 931.6% respecto a 2018.
2.1 Lineamientos para operación
Este programa presupuestario, hasta el momento, no cuenta con reglas de operación y sus lineamientos parecen independientes entre la STPS y la SEP, dado que sólo la STPS los ha dado a conocer por medio del DOF.
Los requisitos generales para ser beneficiario son los siguientes (Diario Oficial de la Federación 2019):
– Tener de 18 a 29 años.
– No trabajar y no estudiar.
– Presentar la documentación e información requerida (CURP, identificación oficial, comprobante de domicilio, certificado de último grado de estudios, fotografía, carta compromiso).
La capacitación durará entre cinco y ocho horas diarias, cinco días a la semana. Este proceso podrá extenderse hasta por 12 meses, tiempo en el que los becarios gozarán de cobertura médica por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de una transferencia de 3 mil 600 pesos mensuales. Cada becario podrá participar una sola vez en el programa y recibirá una constancia de la STPS al finalizar su instrucción.
Por parte de la SEP se carece de información sobre los requisitos para ser beneficiario del programa, ya que sus lineamientos no han sido publicados.
3 Características de la población mexicana
Actualmente, por cada 100 mexicanos en edad de trabajar (de 15 a 64 años) hay 50.6 personas que son dependientes3, como los niños y los adultos mayores. Esta razón es la tasa de dependencia económica (Consejo Nacional de Población 2018).
Cuando el porcentaje de las personas no dependientes supera el de las dependientes, se habla de un bono demográfico para dicha población (Paulo Saad, Tim Miller, Ciro Martínez, Mauricio Holz 2012), ya que implica que la mayoría de la gente está en edades aptas para trabajar.
Para México la tasa de dependencia ha disminuido desde 1971 y seguirá descendiendo por 12 años más, hasta 2031. El CONAPO estima que, a partir de ese año, la tasa de dependencia comenzará a subir con el envejecimiento de la población. En 2019 la mediana de edad en México es de 28 años, en 2031 será de 32.1 años (Consejo Nacional de Población 2018).
3.1 Características de la población objetivo
A tráves de la ENGIH, en 2016 se contabilizaron 23.5 millones de personas entre 18 y 29 años, de las cuales, 5.2 millones (22%) declararon no haber trabajado el mes previo a la encuesta y tampoco estar estudiando en el momento del levantamiento. De este subgrupo, 83% son mujeres y 17% hombres.
La proporción más alta de estos jóvenes se encontró en el decil número uno de ingresos, proporción que desciende progresivamente hasta el décimo decil (ver figura 1).
FIGURA 1. JÓVENES QUE NO ESTUDIAN Y NO TRABAJAN POR DECILES DE INGRESO.
Fuente: Elaborado por el CIEP, con información de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (2016).
Entre los jóvenes (hombres y mujeres) que no estudian y no trabajan, 74.7% declaró dedicarse a quehaceres del hogar. La búsqueda de empleo ocupó a 15.5%, mientras que 3.7% reportó tener alguna limitación física que le impide trabajar (ver figura 2) (Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2016).
En el caso de las mujeres el orden es similar, aunque un porcentaje mayor de ellas se concentra en quehaceres del hogar (87.7%). A la búsqueda de empleo se dedicó 6.7% y 1.9% reportó limitaciones físicas.
Para los hombres la distribución según actividad no económica es distinta, ya que la mayoría se dedicó a buscar empleo (58%). Las limitaciones físicas para trabajar fueron la segunda opción más frecuente (12.4%) y, en menor medida, los quehaceres del hogar (11.3%).
Independientemente del decil de ingreso, los quehaceres del hogar se mantienen como la actividad más realizada, seguida por la búsqueda de empleo.
FIGURA 2. JÓVENES QUE NO ESTUDIAN Y NO TRABAJAN POR ACTIVIDAD NO ECONÓMICA.
Fuente: Elaborado por el CIEP, con información de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (2016).
En cuanto a la ubicación geográfica de esta población, Oaxaca, Tabasco y Veracruz son las entidades donde los hombres y mujeres jóvenes que no estudian y no trabajan representan una mayor proporción, respecto a la población total de 18 a 29 años (ver figura 3). Entre los 32 estados el elemento común es que las mujeres en esta condición son, al menos, tres veces más que los hombres.
En Oaxaca se registra la mayor presencia de mujeres sin estudiar ni trabajar. Por cada hombre que no estudia y no trabaja en el estado, hay 11 mujeres en la misma situación. En Ciudad de México, donde se tiene la menor diferencia, por cada hombre que no estudia y no trabaja hay tres mujeres que tampoco lo hacen.
Al ser los estados con mayor población de la república, en términos absolutos, Estado de México, Veracruz y Ciudad de México albergan el mayor número de jóvenes, tanto hombres como mujeres, que no estudian y no trabajan.
Dada la predominancia de mujeres en la población que no estudia y no trabaja, omitir una estrategia de género para el programa JCF podría generar que la población que demande la beca sea menor que la estimada. Gran parte de estas mujeres se dedican a realizar quehaceres del hogar y una estrategia para integrarlas al mercado laboral requeriría de un enfoque especial (Juan BERMÚDEZ-LOBERA 2014).
FIGURA 3. JÓVENES QUE NO ESTUDIAN Y NO TRABAJAN POR ESTADOS.
Fuente: Elaborado por el CIEP, con información de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (2016).
4 Comentarios finales
Como resultado del análisis realizado en este boletín, se presentan las siguientes consideraciones finales:
- La población potencial del programa podría ser mayor que la que se tiene prevista. En 2016, 5.2 millones de personas de 18 a 29 años declararon no haber trabajado en el mes previo a la encuesta ni estar estudiando en el momento del levantamiento, 22% de la población total de 18 a 29 años. Sin embargo, JCF estima una población objetivo de 2.3 millones de jóvenes con las mismas características.
- Para 2019, el CONAPO calcula un total de 25.8 millones de personas de 18 a 29 años, el 22% de esta población, que equivale a la proporción de jóvenes sin estudiar ni trabajar en 2016, asciende a 5.7 millones de jóvenes.
- Los lineamientos del programa no incluyen los plazos de operación que lo rigen. Por ejemplo, el período de inscripciones no cuenta con fecha límite y no se hace explícito algún mecanismo para acotar el número de beneficiarios a 2.3 millones.
- Rebasar el número de becarios estimado representaría también una carga extra para el IMSS, ya que los beneficiarios contarán con cobertura médica durante su capacitación, la cual puede durar hasta un año.
- La beca mensual para cada joven es de 3 mil 600 pesos y podrá recibirla hasta por un año. Para becar a 2.3 millones de jóvenes por 12 meses serían necesarios 99 mil 360 mdp. No obstante, el presupuesto para este programa (vía STPS) es de 40 mil mdp, monto que permite becar únicamente a 925 mil 926 jóvenes por ese período. Esto representa sólo 40.3% de la población objetivo del programa.
- Motivar la inserción al mercado laboral de las mujeres que no estudian ni trabajan, dedicadas en su mayoría a quehaceres del hogar, podría requerir de otro tipo de incentivos, como servicios de guardería y la alternativa de combinar su capacitación con los quehaceres del hogar (Juan BERMÚDEZ-LOBERA 2014; Eva Arceo, Raymundo Campos 2011; Ernesto Aguayo, Gloria Mancha, Erick Rangel 2013).
- No se ha informado sobre una estrategia coordinada entre las secretarías que operan el programa. Se desconocen los lineamientos de operación por parte de la SEP, por lo que no es posible conocer qué diferencias hay entre estas becas y otras que ya existen para nivel superior.
- El programa está sesgado al ámbito urbano. El perfil de los centros de trabajo que solicita empata más con los disponibles en las urbes, dificultando el acceso de la población rural a los beneficios del programa.
- JCF tiene una visión de corto plazo, dado que la capacitación pueder ser máximo de un año y no está necesariamente vinculada con el giro de trabajo de los becarios. Además, los lineamientos del programa no plantean una estrategia de seguimiento. Esta desarticulación podría provocar que al término de la capacitación vuelvan a la inactividad.
Consejo Nacional de Población. 2014. “Glosario.” Disponible en http://www.conapo.gob.mx/en/CONAPO/Glosario_CONAPO.
———. 2018. “Indicadores demográficos 1950 – 2050.” Disponible en https://bit.ly/2PZ7e9s.
Diario Oficial de la Federación. 2019. “Lineamientos para la operación del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro.” Disponible en https://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5547857&fecha=10/01/2019.
Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares. 2016. “Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares.” Disponible en https://www.inegi.org.mx/programas/enigh/nc/2016/.
Ernesto Aguayo, Gloria Mancha, Erick Rangel. 2013. “Descifrando a los Ninis. Un estudio para Nuevo León y México.” Disponible en http://eprints.uanl.mx/3189/1/DESCIFRANDO_A_LOS_NINIS%5B1%5D.pdf.
Eva Arceo, Raymundo Campos. 2011. “¿Quiénes son los NiNis en México?” Disponible en https://cee.colmex.mx/documentos/documentos-de-trabajo/2011/dt20118.pdf.
Juan BERMÚDEZ-LOBERA. 2014. “Las transiciones a la adultez de los jóvenes no estudian ni trabajan (ninis) en México, 2010.” Disponible en https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=11230198009.
Paulo Saad, Tim Miller, Ciro Martínez, Mauricio Holz. 2012. “Juventud y Bono Demográfico en Iberoamérica.” Disponible en https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/1495/S2012103_es.pdf.
Secretaría de Hacienda y Crédito Público. 2019. “Presupuesto de Egresos de la Federación 2019.” Disponible en https://www.transparenciapresupuestaria.gob.mx/es/PTP/Datos_Abiertos.
Secretaría del Trabajo y Previsión Social. 2019. “Jóvenes Construyendo el Futuro.” Disponible en https://jovenesconstruyendoelfuturo.stps.gob.mx/.
- Descritas como habilidades blandas en los lineamientos.↩
- El gasto educativo comprende lo asignado a la función educación, más lo asignado a la SEP por funciones diferentes a educación.↩
- Población en edades económicamente inactivas, menores de 14 años y personas de 65 años en adelante (Consejo Nacional de Población 2014).↩